Tres empresas ofrecen 350 millones por los terrenos del viejo Mestalla

La arena del desierto cubría el maná. Pero una ventolera ha descubierto el tesoro. No sólo uno; hasta dos. El Valencia puede pasar en unas semanas de la pobreza más extrema a la opulencia. Hasta 650 millones en el bolsillo: 300 por permitir a una empresa la explotación de la zona comercial del nuevo estadio y 350 por las torres de Mestalla. Lo mejor para el club es que hay empresas que hacen cola para rascarse el bolsillo y pujar por alguna de las opciones que se presentan.

Por el terciario hay una firma que se ha lanzado a cara descubierta. Arena pretende explotar el terciario del coliseo de Cortes Valencianas. El jueves se reunió Antonio de la Peña, representante de la multinacional, con Vicente Soriano para trasladarle la propuesta.

Pero las ofertas se acumulan en la mesa presidencial. En este caso por las torres que tienen previsto construirse en los terrenos donde actualmente se asienta el estadio de Mestalla. Hasta tres empresas han hecho llegar su interés por abonar los 350 millones que solicita el Valencia a cambio de los bloques de edificios. Se trata de multinacionales de reconocido prestigio, una de ellas de capital norteamericano.

El nuevo máximo responsable del Valencia no quiere precipitarse. Todavía espera que alguna firma se sume a la puja. Una de ellas podría ser ING. Soriano negoció con la empresa que patrocina al equipo de Fórmula 1 en el que pilota Fernando Alonso y esta se encontraba dispuesta a la compra de las torres. La oferta se la trasladó a Juan Soler, pero en ese momento las relaciones entre los dos grandes accionistas no pasaba por su mejor momento y ni se atendió la propuesta.

Ahora podría sumarse al grupo de aspirantes. Tres son en firme y en ellas se está trabajando. La intranquilidad que pesaba sobre Vicente Soriano para sanear la entidad se está convirtiendo en confianza. Serán 350 millones de euros. Y eso cuando hasta los más optimistas ni imaginaban que se llegaría a esa cantidad. El mismo Soler manifestó hace unos meses que la crisis económica pesaba como una losa y que si conseguía 250 millones se daría con un canto en los dientes. Además, hay que recordar que el anterior presidente ya ha adquirido una de las torres, aunque sólo ha pagado una parte. Habrá que ver si con la futura venta se le reembolsa a Soler el dinero invertido.

La negociación entre Soriano y las empresas se encuentran todavía en un punto inicial. Al igual ocurre con Arena pese a la reunión cara a cara que mantuvieron Vicente Soriano y Antonio de la Peña, uno de los representantes de la firma. En ese cónclave se acordó que la firma explotaría la zona comercial del nuevo estadio. Pero no sería toda. El Valencia quiere que sólo sea una parte. No quiere hipotecarse para el futuro. Sabe que se trata de una fuente de beneficio y no tienen intención de despedirse de ella por una buena cantidad de años, algo que todavía no se fijado.

Arena, además de gestionar los comercios que se instalen en el estadio, pretende celebrar eventos de todo tipo y conciertos musicales. La multinacional no es novata en estas lides. Ya gestiona otros recintos deportivos, como puede ser el Allianz Arena, uno de los coliseos más futuristas del planeta.

Soriano tendrá que decidir cuál es la mejor opción para ambas vías de financiación. El presidente del Valencia sabe que lo más importante es que el equipo gane partidos, pero es consciente que con las arcas llenas este objetivo es más factible. Serán 650 millones como caídos del cielo. El maná.

Vicente Soriano protagonizó ayer su primera toma de contacto con la plantilla. El nuevo presidente aterrizó en la concentración de Ermelo y hoy será testigo del amistoso que el equipo disputará ante el Borussia Moenchengladbach. Soriano saludó efusivamente a Emery y transmitió un mensaje de optimismo. "Hay que estar tranquilos; seguro que todo sale bien", indicó el máximo responsable del club. Tras los negros augurios de Villalonga, Soriano se pronunció sobre el futuro de Villa y Silva: "Hay una negociacion con ellos, no queremos que se vayan, los queremos con nosotros."